Cómo ocurrió la primera ordenación de las bhikkhunis theravada en Australia

31 de octubre de 2009

22 de octubre de 2009: recuerda esta fecha. Es ahí cuando todo ha cambiado. Es ahí cuando el Sangha del Monasterio Bodhinyana y el Monasterio de Monjas Dhammasara con el apoyo internacional del grupo de las bhikkhunis, realizó la primera ordenación de las bhikkhunis theravada en Australia y la primera ordenación de las bhikkhunis dentro de la Tradición Tailandesa del Bosque, en general. He aquí sobre cómo todo esto pasó.
La ordenación de las bhikkhunis se ha avivado como el tema del budismo internacional, por lo menos desde la década de 1970 cuando Tenzin Palmo tomó la ordenación plena. Realmente, esto se ha discutido ya antes, como lo muestra el apoyo brindado a la ordenación de las bhikkhunis por Jetavan Sayadaw, en sus documentos de 1949, en los cuales hizo referencia acerca de la discusión contemporánea sobre este tema.
La comunidad occidental, o mejor dicho, la comunidad angloparlante de los monjes de Ajahn Chah, empezó en la década de 1960, alcanzando el ímpetu en 1970 con el establecimiento de primer monasterio occidental en Tailandia, Wat Pa Nanachat (Monasterio Internacional del Bosque) y en los 80 con sus numerosas ramificaciones.
El problema sobre cómo el apoyo a la aspiración de la ordenación de las mujeres llegó a presionar al nuevo entorno y a la comunidad inglesa, se reflejó con el desarrollo de una plataforma de ordenación totalmente nueva, llamada siladhara. La misma es superficialmente similar a la plataforma canónica de samaneri, de las muchachas jóvenes, o a la de dasasilamata cingalés, pero en realidad está basada en un nuevo sistema de reglas inventado por Ajahn Sucitto en el marco de la discusión que sostuvo con la comunidad inglesa en los 80. Estas nuevas reglas han sido estructuradas alrededor de los patimokkhas canónicos para bhikkhus y bhikkhunis, aunque introduciendo muchos cambios sustanciales. Esta plataforma de siladhara ha sobrevivido en los monasterios de Amaravati y Chithurst y actualmente cuenta con unas 15 monjas.
Al mismo tiempo, había pocas novedades por parte de los Ajahn ingleses acerca de la ordenación de las bhikkhunis, y aunque a veces se decía que siladhara era un intento para convertirse en un escalón hacia la ordenación de las bhikkhunis, no había signos de algún esfuerzo real que lo hiciera posible. En vez de esto, el problema de la ordenación de las bhikkhunis ha sido silenciado cada vez que aparecía.
Mientras tanto, la comunidad de Ajahn Jagaro y luego la de Ajahn Brahm en Perth contaba con un largo periodo de intentos orientados hacia el establecimiento de la comunidad de las monjas. Esto llegó a ser posible en la última parte de la década de los 90, cuando Ajahn Vayama fue invitada a establecer la comunidad en Dhammasara. Ajahn Vayama, si bien mantenía una respetuosa conexión con la comunidad inglesa, no fue ordenada ahí, sino en Sri Lanka. Yo estuve presente cuando se iniciaban sus conversaciones con Ajahn Brahm y ella expuso bien claro que su deso no era el de seguir el modelo inglés. Ajahn Brahm respondió entonces, que Bodhinyana no era una ramificación de Amaravati.
La comunidad de Dhammasara estaba basada en los 10 preceptos de las samaneri, complementados con sus propias reglas monásticas.
La comunidad internacional, mientras tanto, ha dado un gran paso hacia la ordenación de las bhikkhunis. Las primeras bhikkhunis theravadin fueron ordenadas durante la década de 1980, siendo quizá la primera Ayya Khema, que casualmente fue una de las primeras maestras de Ajahn Vayama, y originalmente fue la administradora de la tierra que actualmente se convirtió en el monasterio Santi Forest. Muchas más la siguieron y, durante la década de 1990, tuvo lugar una serie bien conocida de múltiples ordenaciones en la India y en Sri Lanka. Al inicio, la orden de las bhikkhunis de Sri Lanka recibió una fuerte oposición, pero ahora hay ahí varias centenas de bhikkhunis que derribaron los obstáculos y se sobrepusieron a ellos con sus vidas.
Chatsumarn Kabalsingh, una distinguida académica tailandesa y figura mediática, tomó la ordenación de bhikkhuni en Sri Lanka en 2003 bajo el nombre de Dhammananda, convirtiéndose en la primera bhikkhuni de la nueva generación tailandesa. Muchas las siguieron y, en este momento, haya quizá unas 20 a 30 bhikkhunis en Tailandia.
También Camboya tiene una pequeña comunidad de bhikkhunis, con un grupo cercano a 20 monjas apoyadas por uno de los Sangharajas del lugar.
Birmania, por otro lado, posee el más vergonzoso récord en cuanto a la opresión de las bhikkhunis. Saccavadi, ordenada en Sri Lanka, al retornar a Birmania ha sido encarcelada, abusada y traumatizada, y finalmente, obligada a dejar los hábitos. Sin embargo, debo agregar que la mayoría de los monjes birmanos que conozco, apoya la plena ordenación de las bhikkhunis pero lo había dejado de expresar. Por otro lado, a las bhikkhunis “mahayana” al menos se las permite estar en los monasterios birmanos y practicar la meditación, lo cual aún se está negando dentro de la Tradición Tailandesa del Bosque.
Mientras todo esto sucedía, e internacionalmente se estaba progresando en casi todos los países de tradición Theravada, la tradición de Ajahn Chah no ha hecho nada. No había diálogo, investigaciones ni pláticas acerca del cambio.
A partir del año 2002, más o menos, empecé a hablar a los monjes acerca de esto. Tanto personalmente como en las cartas, este tema apareció como uno que necesitaba ser encaminado. Con la excepción de Ajahn Brahm y, en cierta medida, de Ajahn Sucitto, no obtuve respuesta alguna por parte del liderazgo, aunque muchos monjes jóvenes y adultos, que no cumplían con roles institucionales, se mostraban receptivos. Yo seguía conversando, escribiendo e investigando. Apunté hacia tres temas: las supuestas objeciones técnicas del Vinaya sobre la ordenación de las bhikkhunis; los problemas sicológicos que se evidencian en el debate; y, el interés práctico existente en el establecimiento de la comunidad de monjas.
Pienso que fue hacia el año 2006 cuando Ajahn Brahm me dijo que ahora él estaba ya plenamente convencido sobre que la ordenación de las bhikkhunis era el camino a tomar. Él tuvo el apoyo de sus monjes, especialmente de Ajahn Brahmali y empezó a animar a Ajahn Vayama a tomar la ordenación de bhikkhuni. Mientras tanto, Ajahn Vayama y las monjas de Dhammasara fueron visitadas por varias bhikkhunis, lo que les permitió mantener conversaciones, encontrar puntos de vista comunes y visualizar que su futuro como bhikkhunis se estaría materializando.
En estos días, el monasterio Santi Forest se convirtió en un bien conocido centro de apoyo internacional para las bhikkhunis. Teníamos muchas mujeres candidatas, interesadas en la ordenación de las bhikkhunis, pero por alguna razón u otra, ninguna de ellas procedió a recibir la ordenación plena. No es una cosa fácil y se vuelve bastante duro el hecho de recibir malas vibraciones por gran parte del Sangha de los bhikkhus. Por un tiempo estábamos pensando unir la ordenación de las bhikkhunis con las monjas de Dhammasara, quizá para el febrero de 2010. Pero nuestra candidata potencial decidió que aún no estaba lista para dar este paso. Además, la comunidad de Dhammasara deseaba una ceremonia reservada, la cual enfatizaría el verdadero significado de la ordenación -la aceptación dentro del Sangha- antes que hacer de esto un evento mediático.
Durante el vassa del 2009, los Ajahnes Brahm y Vayama mantuvieron una serie de conversaciones, durante las cuales decidieron llevar a cabo la ordenación de bhikkhunis. Sintieron que sus comunidades estaban listas, pero que no querían tener que lidiar con diversas formas de oposición organizacional que inevitablemente llegarían una vez se anunciara la fecha. Entonces, invitaron a participar a un grupo internacional de ocho bhikkhunis que fueron las siguientes: las Venerables Tathaaloka (la preceptora), Sucinta y Sobhana (recitadoras del acto formal), Atapi, Satima, Santini, Silavati y Dhammananda (del Vietnam). Ajahn Brahm y yo fuimos los recitadores del acto por parte de los bhikkhus. Las cuatro monjas de Dhammasara han sido ordenadas, esto es, las Venerables Vayama, Nirodha, Seri y Hassapañña.
Todas las bhikkhunis recibieron su ordenación dentro de la tradición Theravada y son bien conocidas como sinceras practicantes. Se ha decidido no incluir a ninguna bhikkhuni de la tradición Mahayana, siendo que esto podría ser objetado por algunos theravadins conservadores. Por esta misma razón, dos bhikkhus coreanos que estaban en Bodhinyana fueron respetuosamente pedidos a permanecer fuera de los límites del sima. Esto no quiere decir que la presencia del Sangha Mahayana afectaría la ordenación de alguna manera. Por el contrario, siendo ellos bhikkhus y bhikkhunis calificados, ordenados de acuerdo al Vinaya Dharmaguptaka, están claramente en samvasa (en comunión) de acuerdo al Vinaya y ningún monje ni monja que tomó parte de la ordenación tendría problema alguno en incluirlos. No obstante, la gran parte del Sangha Theravada percibe al Sangha Mahayana como perteneciente a una orden totalmente diferente, si no hasta a una diferente religión, por lo cual ellos podrían usar esta inclusión como una manera para criticar el procedimiento.
Durante los días que precedieron la ordenación, el Sangha de Bodhinyana fue consultada respetuosamente sobre si la apoyaría. Esto ocurrió durante la reunión del día de Uposatha anterior al domingo. Yo había vuelto a hablar con ellos el día miércoles y Ajahn Brahm los consultó una vez más el día de su retorno, un poco antes de la ordenación del día jueves. Todos los mensajes relevantes que hemos recibido de varios de los Ahajn han sido impresos y puestos a ser conocidos. Y los monjes fueron animados a leerlos de manera tal que pudieran tomar una decisión informada. Todos los monjes permanecieron firmes en su apoyo a la ordenación de las bhikkhunis. Sin embargo, uno de los monjes solicitó ser excusado de participar de la ceremonia siendo que había sido ordenado por Ajahn Sumedho y hubiese preferido que la ordenación se realizara siguiendo los planes, en el mes de diciembre.
En este tiempo, Ajahn Brahm estaba ausente visitando a su madre enferma en Inglaterra, así como llevando varias enseñanzas a Inglaterra, Noruega y Singapur. El día domingo, anterior a la ordenación, visitó a Amaravati, donde ofreció sus respetos a Ajahn Sumedho a quien comentó sobre que estaría llevando a cabo la ordenación de las bhikkhunis el siguiente jueves. Ajahn Sumedho le advirtió en contra de esto. Después de dicho encuentro, parece que han sido enviados emails alrededor del mundo a los monjes occidentales, provocando una instantánea reacción en contra de la ordenación.
La mayoría de los Ajahn ha respondido de manera razonable, expresando su respeto y presentando su punto de vista, según el cual no era sabio proseguir con la ordenación sin consultar ampliamente al Sangha. La mayoría de los mensajes que hemos recibido, en un principio, expresaba el apoyo a la ordenación de las bhikkhunis, pero no de la manera que se estaba llevando a cabo. Ajahn Brahm respondió a esto inmediatamente señalando que, de hecho, él hubo consultado a la comunidad ampliamente, incluyendo a Wat Pa Pong. Yo, por mi parte, también he respondido con una carta que detallaba cómo la discusión sobre la ordenación de las bhikkhunis ha sido consecuentemente silenciada dentro del Sangha occidental de Ajahn Chah.
Algunas pocas respuestas habían sido más o menos agresivas, con amenazas implícitas y explícitas de los Ajahns expresadas a través de los emails, faxes o llamadas telefónicas. Les mostré que eran farolones el martes y el miércoles así como las amenazas y los mensajes agresivos se enfriaron.
Puse en relieve un número importante de temas en estos mailes sin haber recibido ni una sola respuesta de fondo. Los Ajahns estaban más preocupados por señalar un par de errores de hecho en el mail de Ajahn Brahm, como también por indicar mis equivocaciones (los cuales, por otra parte, no fueron más que malas interpretaciones de mi carta original). Sin embargo, ellos continuaron con su total y mudo silencio en cara al problema real: la discriminación en contra de las mujeres en el Sangha y el potencial transformador de la ordenación de las bhikkhunis.
Las comunidades de Perth estaban interpretando bien esta presión. Nos sentimos todos aliviados al hablar por teléfono con Ajahn Brahm el jueves por la tarde, cuando nos dijo que se sentía feliz y calmado y que la oposición fue más o menos lo que esperaba. Las monjas lo interpretaban bien y permanecían firmes y despejadas -ellas estaban acostumbradas a este tipo de presiones.
Hubo también una conversación acerca de los detalles exactos sobre cómo los dos Sanghas tendrían que estar ubicados dentro de los límites espaciales del hall de Bodhinyana. Finalmente, se decidió tener las bhikkhunis de un lado del templo y los bhikkhus del otro lado. Cada Sangha se colocó en dos filas, de manera tal que las candidatas pudieran llegar al medio del Sangha. La ceremonia ha sido conducida con toda la precisión de acuerdo al Vinaya en pali, con la adición de unas pocas ceremonias al inicio provenientes de la tradición tailandesa.
La ceremonia de la ordenación empezó a las 19:15. Ayya Tathaaloka, una respetada bhikkhuni de 13 años de experiencia, fue formalmente nombrada como preceptora (pavattini) por el Sangha de las bhikkhunis. Siendo que no más de tres pueden ser ordenadas al mismo tiempo, las candidatas fueron ordenadas en dos grupos de a dos. El pleno procedimiento ha sido llevado a cabo por el Sangha de las bhikkhunis, con las candidatas requeridas por su preceptora, instruidas por el Sangha y preguntadas dentro del Sangha, antes de la final “Moción de los Tres Anuncios” (ñatticatutthakamma), que es la ordenación propiamente dicha.
Cuando las dos pares han sido ordenadas dentro del Sangha de las bhikkhunis, fueron llevadas en pares al Sangha de los bhikkhus. La ordenación frente a los bhikkhus es mucho más simple, siendo que ya no existen las preguntas de las candidatas ni la elección del preceptor. El rol del Sangha, de acuerdo al Vinaya en pali, consiste simplemente en confirmar la ordenación, estampar en ella su sello de aprobación y reconocer la aceptación de las candidatas. Ajahn Brahm y yo efectuamos los cantos y, confieso, que como una lluvia de arrobamiento, las auspiciosas palabras finalmente llegaron a ser verdad: evam etam dharayami -así lo tendré en cuenta. La ceremonia concluyó cerca de las 21h.
Entonces, las nuevas bhikkhunis se sentaron en medio de los dos Sanghas, mientras recitábamos todos el Metta Sutta como bendición. Es imposible describir el sentimiento de gozo y exultación que llenó el hall -fue inolvidable. Había luz y claridad que se percibía arriba en el cristalino cielo de Perth, así como lo recuerdo muy bien desde mi niñez. Así la ordenación, como una avalancha de ayuda y alegría se ha vertido de ahí hacia el mundo entero. El futuro nunca habrá sido más brillante.

Traducido del inglés por Isidatta. Cortesía de Bosque Theravada.

Posición de Wat Nong Pah Pong

Para el Venerable Somdet Buddhajahn
Director del Comité de Práctica de los Deberes como sustituto de Su Santidad el Sangharaja

Octubre 9, 2.552 D.B.

Asunto: Desaprobación de la ordenación de bhikkhuni;


Estimado y altamente respetado Venerable Somdet Buddhajahn, Líder del Comité de Práctica de los Deberes como sustituto para Su Santidad el Sangharaja.
El Sangha de Wat Nong Pah Pong y sus diversos monasterios dependientes y asociados, tanto en Tailandia como en el extranjero, desean afirmar que dan continuidad con la política defendida por el Mahatherasamakom en relación a su desaprobación de la ordenación de bhikkhunis.
Recientemente, esta afirmación fue aseverada en la reunión anual del Sangha en Wat Nong Pah Pong el 16 de junio del año 2552 D.B., donde se tomóla decisión de prohibir a cualquier monasterio dependiente asociado de Wat Nong Pah Pong brindar apoyo la ordenación de bhikkhunis. Más áun, cualquier monje que hiciese caso omiso de este acuerdo será excluido de los mismos.
Sin embargo, lamento informarle que Phra Visuddhisamvarathera (Brahmavamso Bhikkhu), el abad del Monasterio Bodhinyana, un monasterio dependiente asociado de Wat Nong Pah Pong en Perth, Australia, recientemente ha anunciado su decisión de dirigir una ordenación de Bhikkhuni en su monasterio el 22 de octubre, del año 2.552, actuando como preceptor (upajjhaya).
Brahmavamso Bhikkhu ha planeado unilateralmente esta ordenación sin previa consulta con el Sangha de Wat Nong Pah Pong. De hecho, ha ocultado su plan al Sangha de Wat Nong Pah Pong, al no permitir al Sangha de Wat Nong Pah Pong saber de ella hasta el 15 de octubre, cuando puso al tanto de sus planes a Phra Rajasumedhajah (Sumedho Bhikkhu), abad del Monasterio Budista Amaravati, en Inglaterra, sobre sus planes. Observo las acciones del Venerable Brahmavamso Bhikkhu como contrarias a varias resoluciones del Sangha de Wat Nong Pah Pong. Por ejemplo, en el encuentro internacional de monasterios dependientes asociados a Wat Nong Pah Pong (Encuentro Mundial de Abades) en el año 2.549, él se comprometió a abstenerse de tomar acciones unilaterales que pudieran tener consecuencias significativas para el resto del Sangha de Wat Nong Pah Pong. También aseguró por escrito en una carta al abad de Wat Pah Nanachat, que no tenía intención alguna de ordenar bhikkhunis.
Ahora los grandes Theras de Europa han enviado una carta al Venerable Bhikkhu Brahmavamso expresando su oposición a sus acciones, y solicitándole detener la ordenación de Bhikkhuni inmediatamente. Al día de hoy, él aún no ha abandonado (su plan de conducir la ordenación).
De acuerdo con el convenio del Sangha de Wat Nong Pah Pong y sus monasterios dependientes asociados de junio 16 del año 2.550 y 2.552, éstos se han preparado para excluir al Venerable Brahmavamso Bhikkhu de los monasterios dependientes asociados de Wat Nong Pah Pong.
Respetuosamente presento a usted esta (información) y solicito su compasión al considerar este asunto.

Rindo mis más profundos respetos a usted,

Phra Rajapacanavigrom
Abad de Wat Nong Pah Pong.

Bhikshunis chinas en la Tradición Ch'an (II)

2. Sutras que niegan la presencia de mujeres en la tierra del Buddha.
La escrituras de la Tierra Pura son las más destacadas en esta clase. Por ejemplo, el voto treinta y cuatro del 'Maha Sukhavativyuha-sutra' establece que:
Oh Bagavat, si, después de haber obtenido la Bodhi, las mujeres en los inmensurables, innumerables, inconcebibles e inmensos países del Buddha por todos lados después de haber oído mi nombre, deberían permitir que el desapego surja, no deberían dirigir su pensamiento hacia la Bodhi, deberían, cuando estén libres del nacimiento, no despreciar su naturaleza femenina, y si nacieran de nuevo, deberían tomar una segunda naturaleza femenina, entonces no puedo obtener el conocimiento perfecto más elevado". [6]
El 'Cula Sukhavativyuha' también declara explícitamente que no hay mujeres en la Tierra Pura. Aunque la posibilidad de nacer en la Tierra Pura no es negada a las mujeres, lo que se deriva de aquí es que la naturaleza masculina es necesaria para progresar en el camino del Bodhisattva en la Tierra Pura.

3. Sutras que aceptan a las mujeres como un estado menor de Bodhisattvas
La mayoría de los sutras mahayana caen en esta categoría. Esta incluye textos tales como el 'Saddharmapundarika', el 'Sumatidarikapariprccha', el 'Astasaharikaprajna-paramita', etc. En estos sutras las mujeres son mencionadas como "consejeras bien conocidas" o "buenas amigas" espirituales ('kalyanamitra'), pero están relegadas a las etapas más bajas del Bodhisattva. Para ser consistente con la visión Mahayana igualitaria hacia todos los seres sintientes, el tema de la transformación sexual ha sido introducido en estos sutras. si la virtud, el mérito y la sabiduría de una mujer son extraordinarios, puede, mediante un cambio de sexo, llegar a ser un Bodhisattva o un Buddha en su vida presente o futura. La transformación del género simboliza una transición desde la condición imperfecta de un ser humano representada por el cuerpo femenino hasta la perfección mental de un Bodhisattva y un Buddha representada por el cuerpo masculino. Así, en respuesta al desafío de 'Sariputra', quien representaba tradicionalmente la actitud negativa hacia las mujeres, la Niña Dragón en el Sutra del Loto, que es descrita como muy inteligente y habiendo penetrado dentro del Dharma más profundo, se cambia a sí misma por un Bodhisattva masculino y luego inmediatamente se convierte en un Buddha [7].
Aquí, la transformación del género de la mujer al hombre es un requisito previo para la realización de la budeidad de la Niña Dragón. Aunque el caso de la Niña Dragón demuestra la posibilidad de realización de la budeidad en una mujer, la noción de dicotomía, a saber, la noción de masculinidad y feminidad todavía existe.

4. Sutras que aceptan a las mujeres como Bodhisattvas avanzados y Buddhas eminentes.
El 'Vimalakirti Sutra' y el 'Srimala Sutra' pertenecen a esta categoría. En estos dos `sutras` la posición de las mujeres alcanza su pico más alto. Esta base doctrinal para esta culminación radica en las doctrinas Mahayana de 'sunyata' (vacuidad), 'Tathagatagarbha', no-dualidad, etc. En vez de tratar de identificar al hombre con el estado de Bodhisattva, los sutras de esta categoría atribuyen esto a las nociones de dualidad -ya sea, masculino o femenino, sujeto u objeto, etc.- que son simplemente apegos mentales contrarios a la enseñanza de la vacuidad. Las características de 'masculinidad' y 'feminidad' son simplemente ilusorias e irrelevantes. Sobre esta base, la Bodhisattva rechaza experimentar el cambio de sexo. Cuando Sariputra preguntó por su transformación, la Diosa en el Vimalakirti Sutra dijo, "He estado aquí durante doce años y he buscado las características innatas de la feminidad pero no he sido capaz de encontrarlas. ¿Cómo puedo yo cambiarlas?" [8]. Entonces la Diosa cambió a Sariputra en una mujer. Esto es para reforzar su afirmación de que toda persona y objeto trasciende las distinciones de género cuando se ve el mundo como vacío. Este punto de vista es ilustrado concretamente mediante la transformación de Sariputra.

Bhikshunis chinas en la Tradición Ch'an (I)

por Heng-Ching Shih

El espíritu de las doctrinas budistas mahayanas esenciales asume la igualdad entre hombres y mujeres, aunque en el plano mundano la posición de las mujeres budistas es inferior a la de los hombres budistas. La tradición budista china ch'an, siguiendo la enseñanza igualitaria de la mente única de la iluminación, aboga por la no-discriminación, el acceso universal al camino budista para todo ser sintiente, sea hombre o mujer.
No obstante, el status de las mujeres y sus capacidades espirituales no han sido mantenidos en alto en la historia budista como en la escuela china Ch'an. Aunque el Buddha reconoce que "las mujeres, habiendo ido adelante desde la vida hogareña hacia la vida sin hogar en el Dharma y la disciplina proclamadas por el Buscador de la Verdad, son capaces de realizar el fruto del que entra en la corriente o el fruto del que retorna una vez o el fruto del que no-retorna o la perfección" [1], las mujeres no han sido consideradas como iguales en el desarrollo espiritual en la literatura budista.
Las mujeres budistas en el Budismo temprano gozaban de una posición más alta que la de sus colegas posteriores, aún en numerosos textos tempranos budistas eran retratadas como celosas, estúpidas, apasionadas y llenas de odio. Los prototipos para la imagen negativa de las mujeres son las hijas de 'Mara', personificadas como Deseo, Codicia y Avidez. A los practicantes quienes fijaban sus cuerpos y mentes en el camino hacia la liberación se les aconsejaba mantener cierta distancia con las mujeres [2]. Se decía que las mujeres tenían cinco obstáculos, llamados ser incapaces de llegar a ser el Rey Brahma, 'Sakra', el Rey 'Mara', Cakravartin o Buddha. El cuerpo de una mujer es considerado impuro y vergonzoso. En la literatura Mahayana vemos una evolución gradual de un concepto positivo de las mujeres en términos de su sabiduría y práctica. Este cambio está basado en la doctrina y la filosofía del Budismo Mahayana. Mientras que la literatura pre-Mahayana representa las opiniones tradicionales de una institución monástica establecida dominada por los monjes, el Mahayana aboga por la figura del Bodhisattva que personifica el estado más alto de sabiduría y compasión en el cual toda discriminación sexual y social cesa de existir. Cada uno, hombre o mujer, monje o laico, es considerado como poseedor de potencial de Buddha. Sin embargo, la literatura Mahayana, al proponer una visión igualitaria, unánimemente no sostiene el status igualitario de las mujeres. El status espiritual de las mujeres es presentado de manera diferente de un sutra a otro dentro de la tradición Mahayana [3]. Hablando en términos generales, los sutras Mahayana que describen el progreso espiritual de las mujeres pueden ser clasificados dentro de cuatro categorías, ilustrando el mejoramiento gradual en las actitudes hacia las mujeres [4].

1. Sutras que sostienen una actitud negativa hacia las mujeres
En estos sutras las mujeres son descritas como la representación del mundo profano, 'samsara', y por tanto como obstáculos potenciales para el crecimiento espiritual. En el 'Udayanavatsaraja-parivartah' (El relato del Rey Udayana de Vastasa) del 'Maharatnakuta' leemos,
Las mujeres pueden destruir los preceptos puros.
Se retiran de conseguir méritos y honor.
Impidiendo a los demás renacer en el cielo,
Ellas son la fuente del infierno. [5]
El Ta-cheng Chou-hsiang kung-te ching ('Sutra Mahayana' sobre los méritos de hacer imágenes del Buddha) representa a las mujeres como de mente estrecha, celosas y odiosas. No perdonan ni retribuyen la bondad. Incluso si buscan la iluminación, no son persistentes. Es cierto que el Mahayana era más comprensivo hacia las mujeres, pero de todos modos el elemento misógino permaneció un poco en su literatura. Sin embargo, este prejuicio extremo contra las mujeres no es más la actitud predominante.

Notas:
[1] I.B. Horner, Tr. The Book of the Discipline, Pali Text Society, London, 1975, vol.5, p.354
[2] En el Sutra de las Cuarenta y dos Secciones, el Buddha dijo a los monjes, "Sean cuidadosos de no mirar a las mujeres. Si sucede que ellas los ven, no las vean a ellas. Sean cuidadoso de no habla con ellas. Si hablan con ellas, asegúrense de guardar sus mentes y modales.
[3] Han habido varios estudios sobre las mujeres budistas hechos por académicos en los últimos años. Los siguientes son tan sólo unos pocos. Dianna Paul, Women in Buddhism, Lancaster-miller, 1980. Rita M. Gross, "Buddhism and Feminism¡G Toward their Mutual Thansformation," Eastern Buddhist, no.1. (spring, 1986). pp. "Changing the Female Body¡G Women and the Bodhisattva Career in Some 'Maharatnakutasutra',Journal of the International Association of Buddhist Studies, 1981.
[4] Pual, Women in Buddhism, pp.169-171
[5] T. 11, p.543.

Ajahn Vayama

Monja de diez preceptos (siladhara) ordenada en Sri Lanka en 1.985 por Ayya Khema, país en el que vivió durante 10 años. Luego permaneció un año con la comunidad de Ajahn Sumedho antes de regresar a residir a Australia.
En 1.998 la Sociedad Budista de Australia Occidental la invitó a tomar el cargo de abadesa en el Monasterio de monjas Dhammasara. Desde entonces reside allí.
Adicional a ofrecer charlas sobre el Dhamma y consejo personal a los devotos, ha enseñado en prisiones, asistido a hospitales y colaborado en servicios matrimoniales y funerarios.
Ajahn Vayama también ha estado muy activa en hacer viable la ordenación completa de Bhikkhuni en Dhammasara. Según sus propias palabras, tanto ella como sus novicias serán ordenadas como bhikkhunis dentro de la tradición Theravada en un futuro cercano.

Links relacionados:
- Vida monástica sin restricciones para las monjas (artículo).

Ajahn Metta

(1.953 - ). Monja de origen alemán. Antes de la vida monástica, trabajaba como secretaria y ayudante de oficina. Es madre de un hijo adulto y vivió una vida familiar antes de entrar en el camino monástico.
Se convirtió en Anagarika en 1.993 en el Monasterio Amaravati y tomó la ordenación como una sīladhāra en 1.996 con Ajahn Sumedho. Ha vivido en los monasterios budistas Amaravati y Chithurst. Ha practicado meditación desde 1.984 y ha vivido con otras comunidades espirituales en Europa y Tailandia (Wat Suan Mokkh). Mientras estuvo allí, entró en contacto con la tradición Theravada. Su primer maestro fue Ajahn Buddhadasa.
Durante su vida monástica, ha estado involucrada en varias áreas de la comunidad. En los últimos años ha estado enseñando meditación en retiros y ha sido una de las monjas que dirige la comunidad de sīladhāras en el monasterio Amaravati. Estuvo en Asia durante un año, en el 2.008, pasando el tiempo en retiros y visitando sitios sagrados en India y Sri Lanka.
En la actualidad, Ajahn Metta es parte de un grupo de monjas mayores que construyen un monasterio para entrenamiento en California.

Jetsunma Tenzin Palmo

(1.944 - ). De origen londinense. En 1.964, a la edad de 20 años, decidió viajar a India tras la búsqueda de su camino espiritual. Allí conoció a su Guru, S.S. el VIII Khamtrul Rinpoche, y se convirtió en una de las primeras mujeres occidentales en ser ordenada como monja tibetana (en 1.973).
Permaneció junto a Khamtrul Rinpoche y su comunidad en Himachal Pradesh, India, durante 6 años, luego de los cuales fue enviada al valle del Himsalaya de Lahaul para llevar una práctica mucho más intensiva. En principio permaneció en un pequeño monasterio en el que estuvo durante varios años, permaneciendo en retiro durante los largos meses de invierno. Luego, buscando mejores condiciones para la práctica, encontró una cueva donde permaneció por 12 años, los últimos en estricto retiro.
Abandonó India en 1.988 y residió en Italia donde enseñaba en varios centros.
Antes de que Khamtrul Rinpoche muriera en 1.980, en múltiples ocasiones le había preguntado a Tenzin Palmo sobre comenzar un monasterio para monjas. Ella entendió la importancia de esto y lo recordó cuando en 1.993 los lamas del monasterio Khampagar en Himachal Pradesh, India, preguntaron de nuevo. En este momento, ella ya estaba preparada para tomar tan formidable tarea y poco a poco fue despertando el interés mundial.
En enero de 2.000, llegaron las primeras monjas y en el 2.001 comenzó la construcción del monasterio de monjas Dongyu Gatsal Palmo recibió el título de Jetsunma, que significa Venerable Maestra, por S.S. el XII Gualwang Drukpa, cabeza del linaje Kagyu Drukpa en reconocimiento por sus logros espirituales como una monja y sus esfuerzos por promover el estatus de las practicantes en el Budismo Tibetano.

Bhikshuni Thubten Chodron

(1.950 - ). Thubten Chodrön creció cerca a Los Ángeles. Se graduó con un B.A. en Historia de la UCLA en 1.971. Después de viajar durante un año y medio por Europa, Asia y Estados Unidos, recibió una credencial de enseñanza y fue a la Universidad de California del Sur para realizar trabajos de post-grado en Educación mientras trabajaba como maestra en el Sistema Educativo Local de Los Ángeles.
En 1.975, asistió a un curso de meditación dictado por el Venerable Lama Yeshe y el Venerable Zopa Rinpoche, y posteriormente asistió a sus monasterios en Nepal para continuar sus estudios y prácticas. En 1.977 recibió la ordenación de sramanerika (novicia) y en 1.986 recibió la ordenación como bhikshuni en Taiwán.
Estudió y practicó el Budismo de acuerdo con la tradición tibetana por muchos años en India y Nepal bajo la guía de S.S. el XIV Dalai Lama, Tsenzhap Serkong Rinpoche, Zopa Rinpoche, entre otros maestros tibetanos. Dirigió el programa espiritual en el Instituto Lama Tzong Khapa en Italia por casi dos años y fue maestra residente del Centro Budista Amithaba en Singapur. Durante 10 años fue maestra residente de la Fundación Dharma Friendship en Seattle, donde continua siendo su consejera espiritual.
La Venerable Chodrön es co-organizadora de Life as a Western Buddhist Nun (La vida como una monja budista occidental), e hizo parte de las conferencias de maestros budistas occidentales con S.S. el XIV Dalai Lama en 1.993 y 1.994. También asistió el Segundo Encuentro Gethsemani en el 2.002. Es muy entusiasta en cuanto al diálogo interreligioso. También ha estado presente en varias conferencias de S.S. XIV Dalai Lama con científicos occidentales.
Thubten Chrodon enfatiza en la aplicación práctica de las enseñanzas del Buddha en la vida cotidiana y es especialmente hábil explicándolas de formas muy fáciles de entender y practicar por los occidentales.

Ajahn Sundara

(1946 - ). Monja de origen francés ordenada dentro de la tradición tailandesa del Bosque de Ajahn Chah. Estudió danza en Francia e Inglaterra. Conoció a Ajahn Sumedho en 1.978 durante un retiro de meditación. Sus enseñanzas y su forma de vida como monje budista, resonaron profundamente.
En 1.983 fue ordenada por Ajahn Sumedho como siladhara (monja de 10 preceptos). Después de pasar 5 años en el Monasterio Chithurst se fue a vivir al Monasterio Amaravati donde participó en el establecimiento de la comunidad de monjas y de su entrenamiento. Entre 1.995 y 1.998 estuvo practicando en monasterio de la tradición del bosque tailandeses. En el año 2.000, después de pasar un año como preceptora de la comunidad de moja en Devon Vihara, fue a Estados Unidos donde fundó el Monasterio Abhayagiri.
Durante los últimos veinte años ha enseñado y dirigido retiros de meditación en Europa y Estados Unidos.
Actualmente reside en el Monasterio Budista Amaravati.

Articulos relacionados:
- Caminando por el mundo.

Fuente: http://www.amaravati.org/abmnew/index.php/about_us/article/34/

Bhikkhuni Kusuma Devendra

Monja completamente ordenada nacida en Sri Lanka y quien fue pionera del re-establecimiento de la orden budista femenina en el mismo país. Su ordenación completa fue dentro de la tradición coreana en Diciembre de 1.996. Es Ph.D. en Vinaya de la Bhikkhuni. También es miembro del comité ejecutivo de la Organización Internacional de Mujeres Budistas Sakyaditha, siendo la primera presidenta de su sucursal en Sri Lanka, y miembro permanente de World Sangha Council.
Ha tomado como tarea propia continuar los esfuerzos de quien fue su mentora, Ayya Khema, al establecer el “Ayya Khema International Buddhist Mandir”. Una vez se complete su edificación, éste ofrecerá estudios de pali y los Suttas Theravada, Abhidhamma, cánticos en pali, meditación e instrucciones en inglés.
Actualmente reside en colombia, Sri Lanka.

Links relacionados: sakyadhita-srilanka

Bhiksuni Chuehmen Shih

Creció en Singapur, recibió su entrenamiento monástico en Taiwán y fue ordenada en enero de 1.991. Actualmente trabaja como coordinadora del sureste asiático y el Budismo Theravada para el Monasterio Fo Guang Shan en Kaohsgiun, Taiwán.
Después de graduarse del Instituto de Investigación Budista Fo Guang Shan en agosto de 1.994, fue asignada a trabajar en el departamento de asuntos internacionales, donde ha organizado varios seminarios internacionales monásticos y ha contactado con personas budistas de los países Theravada.
Bhikshuni Chuemen considera que la parte más difícil de su carrera monástica ha sido la coordinación de la Ordenación Internacional Completa de Bodhgaya sostenida en India en febrero de 1.998. Antes de la ceremonia, a partir de junio de 1.997, viajó ampliamente por India, Sri Lanka, Nepal, Bangladesh, Tailandia y Camboya; rindiendo respeto a S.S. el XIV Dalia Lama, el Supremo Patriarca de Tailandia y Camboya, al Maha Nakaya de Sri Lanka, al más respetado maestro de meditación el Ven. Ananda Mitra Mahathera de India, y a otros monjes mayores que buscan su apoyo espiritual para las monjas theravadines y tibetanas para que sean ordenadas como bhikshunis.
Posteriormente, fue enviada a Bodhgaya, India, para coordinar la ceremonia de ordenación. En febrero de 1.998, monjas theravada y tibetanas de Sri Lanka, Nepal, Tailandia, India, Europa, Estados Unidos, entre otros, participaron en la ordenación internacional.
Bhikshuni Chuehmen está dedica a ayudar a las monjas theravada a reavivar su estado como bhikshunis, y ha trabajo en este proceso con monjes y monjas singaleses, desde 1.998. En marzo de 2.002, el Congreso del Sangha de Sri Lanka le confirió el Título Honorario y el Premio a los Excelentes Servicios Rendidos al Sasana.

Tomado de Congress on Buddhist Women

Ayya Gunasari Bhikkhuni

Nació en Myanmar en 1.932 y después de convertirse en médica, inmigró a Estados Unidos para trabajar en el campo de la medicina con su esposo en 1.961. Después de la llegada de cinco hijos, comenzó su meditación a finales de los años setenta bajo la tutoría de Taungpulu Sayadaw, Sayadaw U Silananda y Sayadaw U Pandita.
Después de casi treinta años, con muchos retiros con estos maestros, ha desarrollado la práctica de los Cuatro Fundamentos de la Atención y de la Meditación Vipassana como fue enseñado por ellos.
En el año 2.002, luego de ser abuela, entró a la vida monástica como una samaneri (novicia) a la edad de 70 años en Dharmavijaya en Los Ángeles, ordenada por el Ven. Bhante Pannyaloka Mahathera y el Ven. Bhante Dr. Walpola Piyananda, Jefe del Sangha Nayaka Thero del Sangha de Sri Lanka en Norteamérica.
En el año 2.003, ella junto a Ayya Saccavadi se convirtieron en las dos primeras mujeres birmanas en ser totalmente ordenadas en Sri Lanka como bhikkhunis conforme a la tradición Theravada vía ordenación doble por el Ven. Dhammaloka Nayaka Thero de la Secta Amarapura en Sri Lanka.
Seguido a la ordenación completa, volvió a Estados Unidos donde ha estado implicada de manera activa en la organización de varios retiros de Meditación Vipassana y clases en el Centro de Meditación Vipassana Thanti Thistar en Riverside, California del Sur. En el año 2.006, fue galardonada como una Mujer Budista Excepcional en el Día Internacional de la Mujer por la Naciones Unidas. En el año 2.007, a pedido de S.S. El XIV Dalai Lama, participó como oradora en el Primer Congreso Global de Mujeres Budistas en Hamburgo, Alemania.
Ayya Gunasari se trasladó al Centro de Meditación Dhamma Dena junto con Ayya Saccavadi y Sayalay Ma Uttamatherhi tras un ofrecimiento de Ruth Denison de Samadhi House (una casa de retiro con 7 habitaciones) como alojamiento monástico al Bhikkhuni Sangha en mayo de 2.007.

Tomado de: Centro de Meditación Dhamma Dena

Ayya Tathaaloka Bhikkhuni

Nació en Washington. A los 19 años entró a la vida monástica como anagarika. Primero viajó a India, pero encontró que el estado de las comunidades monásticas era bastante diferente a lo descrito en los textos antiguos, aunque no por eso dejase de ser inspirador. De allí, decidió viajar al Norte de Asia tras escuchar que las tradiciones monásticas aún existían y había oportunidades y apoyo total a la ordenación, educación y entrenamiento para las mujeres en la vida monástica. Encontró a su maestra preceptora, la Venerable Myeong Seong Sunim, y una fuerte y próspera tradición monástica para las mujeres en Corea del Sur.
Regresó a Estados Unidos en 1.997, nueve años después de haber comenzado su viaje en la vida monástica, Ayya Tathaaloka fue al Bhikkhuni Upasampada en una reunión internacional del Bhikkhu y el Bhikkhuni Sangha de Sri Lanka, Tailandia, Laos, Camboya, Vietnam y Corea en Los Ángeles precedida con Bhante Ratanasara Sangha Nayaka Thera como Upajjaya.
Desde entonces, Ayya Tathaaloka se ha enfocado en estudiar y practicar el Dhamma y el Vinaya y, en especial, en desarrollar un entrenamiento hábil de la mente en la meditación. Ha contactado con el Sangha tailandés en América y el Sangha occidental de la Tradición Tailandesa del Bosque de Ajahn Chah y Ajahn Mun, ha viajado dos veces a Tailandia para visitar monasterios de meditación y hacer peregrinación tudong por el noreste. Por encargo de sus maestros, y en agradecimiento por todos los beneficios que ha recibido, también ha enseñado en la Universidad del Bhikkhuni Sangha en Corea del Sur sobre Comunicaciones sobre el Dhamma en inglés y ha conducido investigaciones en Historia Mundial del Bhikkhuni Sangha. Como parte de este trabajo, visitó las Universidades Sangha y el Mahapajapati Theri Nuns' College en Tailandia para establecer vínculos entre las tradiciones budistas del norte y el sur y brindar mayores oportunidades para la práctica de la meditación y la educación.
En el año 2.005, en reconociendo del creciente número de bhikkhunis y samaneris en Estados Undos y el verdadero valor de su llegada en armonía con el Sangha, propuso y participó en la fundación de la Asociación Norteamericana de Bhikkhunis. Algunos meses después, con el apoyo de maestros budistas y amigos, fundó el Dhammadarini Vihara, dedicado a proveer oportunidades por medio del apoyo moral como material a mujeres interesadas en la vida monástica, el estudio del Dhamma y los retiros de meditación. En el año 2.006 fue galardonada como Mujeres Budistas Excepcional por la Naciones Unidas en Bangkok y en el 2.007 viajó a Hamburgo, Alemania, para hablar en el Primer Congreso Global sobre Mujeres Budistas. En el año 2.008, Ayya Tathaaloka viajó a Maharashtra para el primer Bhikkhuni Parisad Internacional, en Bodhgaya para la Visión del Buddha del entrenamiento de la bhikkhuni y la samaneri y a Australia para el Primer Seminario australiano de bhikkhuni y la primera ordenación de una mujer en el Monasterio del Bosque Santi.
En junio de 2.008, Ayya Tathaaloka junto a un grupo de bhikkhunis theravada en Estados Unidos se reunieron para el primer retiro del Bhikkhuni Sangha en Carolina del Norte y la primera ordenación de samaneri de una mujer estadounidense por el Bhikkhuni Sangha Theravada. Después de 4 años como abadesa de Dhammadarini Vihara, Ayya Tathaaloka se ha trasladado y actualmente vive como maestra residente en la residencia monástica Bodhi House para mujeres budistas en la costa este de San Francisco en Carolina del Norte.

Acharya Ani Pema Chödrön

(1.936 - ). Deirdre Blomfield-Brown es una monja budista ordenada dentro de la tradición Vajrayana y maestra dentro del linaje de Chögyam Trungpa. Nacida en la ciudad de New York y graduada de la Universidad de California en Berkeley. Enseñó durante varios años como profesora de colegio elemental tanto en Nuevo México como en California. Pema Chödrön tiene dos hijos y tres nietos.
Ani Pema primero conoció a su gurú raíz, Chögyam Trungpa Rinpoche, en 1.972. En ese mismo año, viajó a los Alpes franceses y se encontró con Lama Chime Rinpoche, con quien estableció su más profunda conexión y estudió con él desde 1.974 hasta su muerte en 1.987. Recibió su ordenación como novicia en 1.974 con S.S. el XVI Karmapa mientras estudiaba con Lama Chime en Inglaterra. A petición del XIV Karmapa, recibió la ordenación completa como bhikshuni dentro del linaje chino en 1.981 en Hong Kong.
Fue directora de Karma Dzong, hasta su traslado en 1.984 a Cape Breton, Nueva Escocia, para ser la directora de Gampo Abbey. Chögyam Trungpa Rinpoche le dio instrucciones explícitas para el establecimiento de este monasterio para monjes y monjas occidentales.
Actualmente enseña en Estados Unidos y Canadá y planea incrementar el tiempo en retiro solitario bajo la guía del Venerable Dzigar Kongtrul Rinpoche.
Hay escrito varios libros como "The Wisdom of No Escape", "Start where you are: A Guide to Compassionate Living" (Comience donde esté: Una guía para una vida compasiva), "When Things Fall Apart: Heart Advice for Difficult Times", "The Places that scare you" (Los lugares que te asustan), "No Time to Lose" (No hay tiempo que perder), y "Practicing Peace in Times of War: A Buddhist Perspective" (Practicando la paz en tiempos de guerra. Una perspectiva budista).

Bhikkhuni Dhammananda

(1.945 - ). Chatsumarn Kabilsingh.
Su madre, Voramai Kabilsingh, fue la primera mujer tailandesa en llegar a ser ordenada como bhikkhuni., y convirtió su casa en un monasterio. Chatsumarn recibió instrucción budista y entrenamiento sola con las monjas. Siendo inusual en las mujeres tailandesas, accedió a la educación superior. Obtuvo un B.A. en filosofía de la Universidad Visva Bharati, su M.A. en religión de la Universidad McCaster en Canadá, y su Ph.D. en Budismo de la Universidad Magadh en India. Se casó y tuvo tres hijos y tres nietos. Enseñó durante más de treinta años en la Universidad Thammasat en Bangkok, Tailandia, en el Departamento de filosofía y Religión. Reconocida autora de varios libros sobre cuestiones contemporáneas del Budismo en Asia, entre ellos:
  • A Comparative Study of Bhikkhunã Pàtimokkha (1.981)
  • Thai Women in Buddhism (1.991).
  • Women in Buddhism: Questions and Answers. (1.998)
  • Buddhism and Nature Conservation (1.998)
En 1.984, la Dr. Kabilsingh comenzó la publicación Yasodhara: The Newsletter on International Buddhist Women's Activities disponible en casi cuarenta países (algunos de los artículos se pueden encontrar en línea aquí). Pocos años después, en 1.991 organizó la primera conferencia internacional de mujeres budistas, sostenida en Bangkok.
Es co-fundadora de LA Asociación Budista Internacional Sakyadhita, 1.987, y fue presidenta de la misma entre 1.991-2.005.
En el año 2.000 se retiró de la Universidad Thammasat y recibió el precepto de Bodhisattva de Fo Guang Shan en Taiwán. Al año siguiente, tomó la ordenación más baja en Sri Lanka de la Ven. Bhikkhuni R. Saddha Sumana y el Ven. Bhikkhu Dhammaloka. El 28 de febrero de 2.003 recibió la ordenación completa como bhikkhuni también en Sri Lanka, convirtiéndose en la primera mujer tailandesa ordenada dentro de un linaje monástico Theravada. Su linaje de ordenación es Stamoplai de Dambulla. Actualmente reside en el Monasterio Songdhammakalyani en el distrito de Muang, provincia de Nakhonpathom, Tailandia. Desde su ordenación, ha escrito varios libros, destinados a educar el público acerca de varios temas relacionados con el budismo en Tailandia, incluyendo el lugar de las mujeres.
En el año 2.004 fue galardonada como una de las mujeres budistas excepcionales por la ONU y en el 2.005 fue nominada para el Premio Nobel de la Paz. Figura como miembro del comité budista para la selección del Premio Niwano de la Paz. Y también es una de las prestigiosas consejeras de paz entre otros líderes religiosos mundiales incluyendo a S.S. el XIV Dalai Lama.

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Vida monástica sin restricciones para las monjas

Publicado: 28/07/2009

Un monasterio (de la Tradición) del bosque para monjas budistas en Perth, Australia, ofrece un santuario a las mujeres que buscan la vida monástica.

Dos niñas pequeñas, hermanas de aproximadamente cuatro y seis años, se sientan sigilosamente sobre cojines de meditación especiales de tamaño infantil provistos para los visitantes. Haciendo una reverencia, escuchan atentamente como Ajahn Vayama, la abadesa del monasterio de monjas Dhammasara en Perth, Australia, les cuenta la historia de cómo surgió el lugar.

Érase una vez -es decir, en 1.998- una pareja local adinerada que acababa de tener su primer hijo, una niña. Los nuevos padres decidieron ofrecer una gran donación y comprar terrenos para construir para construir un monasterio de monjas budistas, de modo que si un día su hija quería convertirse en una monja, sería capaz de hacer lo cerca de casa, sin necesidad de ir a Asia.
A medida que le sonríe a las niñas, Ajahn Vayama dice: "Ahora, tu puedes escoger no convertirte en una monja cuando crezcas. No todo el mundo quiere. Pero es importante que tengas esa elección".
¿Quién sabe lo que le depara el futuro? Pero seguramente sería poético si en realidad escogieran la ordenación, ya que las muchachas son de ascendencia singalesa. En cierto sentido, son hijas modernas de Sanghamitta, la gran bhikkhuni (monja budista completamente ordenada) arahant, quien en el año 250 AEC llevó el linaje de mujeres ordenadas a Sri Lanka, donde floreció hasta la histórica casualidad de la guerra y la hambruna que condujeron a su descontinuación cerca del 1.100 EC. Antes de esto, la sociedad budista en Sri Lanka había ejemplificado la cuádruple estructura original establecida por el Buddha, constituida de hombres y mujeres monásticos y devotos laicos.

Guiada por el modelo del Buddha, la Sociedad Budista de Australia Occidental (BSWA, siglas en inglés) ha -desde su inicio a comienzo de la década de 1970- tenido como un objetivo fundamental el establecimiento de facilidades monásticas tanto para los monjes como para las monjas. Hoy en día, esta organización secular apoya el Monasterio de monjes Bodhinyana, creado en 1983 por monjes que entrenaron dentro de la Tradición tailandesa del Bosque bajo Ajahn Chah, y el Monasterio de monjas Dhammasara, creado en 1998, y considerado como un monasterio asociado.
La visión original que la BSWA tenía para Dhammasara era proporcionar un lugar a las mujeres para ser ordenadas y para que se formaran como monjas, así como para que las laicas practicaran en un entorno monástico. Al momento en el que se fundó el monasterio, no había perspectiva alguna de bhikkhunis reconocidas por la tradición tailandesa, por lo que la forma de ordenación provista en Dhammasara era la de monjas de diez preceptos que vestían hábitos marrones. Ajahn Vayama, una australiana que había sido ordenada como monja de diez preceptos y que pasó 10 años en Sri Lanka, seguidos de un año en el Monasterio Amaravati en Inglaterra (un monasterio sucursal en el linaje de Ajahn Chah), fue invitada a asumir la posición de abadesa a finales de 1997.

Hubo una decisión deliberada que convirtió a Dhammasara en un monasterio de monjas separado físicamente y completamente independiente. Ajahn Vayama explicaba: "Esto significaba que no se dependía del Sangha de bhikkhus para la enseñanza, el apoyo financiero y cualquier clase de ajuste al orden del día de cómo deberían ser las cosas. Las monjas toman todas las decisiones y son absolutamente responsables de construir y controlar el monasterio. Siempre existió un gran sentimiento de apoyo y cooperación de parte de los monjes, sobre todo de Ajahn Brahm [el abad de Bodhinyana]. Pero éste ha de sostenerse por sus propios pies".
Su independencia es una característica distintiva de Dhammasara. En la mayoría de los casos, tanto en Occidente como en Tailandia, las monjas viven en el mismo monasterio -aunque en su propia sección- con los bhikkhus, y a menudo difieren de ellos, especialmente si el abad es uno sumamente respetado. En Occidente existen ermitas y viharas, o residencias monásticas, independientes, donde viven una o dos monjas. Sin embargo, Dhammasara es el único lugar que, hasta ahora, ha sido establecido de manera deliberada como un monasterio para el entrenamiento de monjas budistas.
Aunque no siempre fue fácil, requiriendo trabajo duro y fortaleza durante más de 10 años, Dhammasara ha probado que, en efecto, puede mantenerse por sí mismo y encontrar su camino. En los primeros días, Ajahn Vayama fue la monja pionera solitaria, acampando en una caravana en el hábitat silvestre de Australia. Hoy en día, la comunidad monástica ha crecido para incluir a cuatro (y en cierto momento cinco) monjas, tres anagarikas (postulantes de ocho preceptos) y un número fluctuante de laicos invitados así como visitantes monásticas. Con la mano (literalmente) ofrecida por partidarios laicos se han construido caminos, kutis (chozas), un edificio central para múltiples fines y otras infraestructuras. No obstante, la mayor parte de la propiedad que se extiende por casi seis hectáreas ha sido preservada concienzudamente en su prístina condición natural como le conviene a un monasterio del bosque.

Andando por los caminos de tierra, uno puede oír los sonidos de las llamadas de pájaros y animales misteriosos que susurran en el monte. Menos misteriosos son los canguros que corretean alrededor de los campos y algunas veces vienen descaradamente cerca -especialmente en el área de la cocina en busca de sobras. Mientras tanto, los kutis extensamente espaciosos están rodeados por la densa vegetación de altísimos árboles y plantas herbáceas puntiagudas australianas. El simple hecho de estar inmerso en la atmósfera natural trae paz a la mente mágicamente.
Es raro encontrar un espacio como este para las mujeres, donde puedan tener las mismas condiciones físicas para practicar a las que los hombres reciben en un monasterio del bosque: viviendo en reclusión y rodeados por la naturaleza -ambos son muy beneficiosos para la meditación. Cada monja permanece en su propio kuti y, dependiendo de la disponibilidad, incluso las laicas invitadas por mucho tiempo también lo pueden hacer. A diferencia de los monasterios de monjes, donde las laicas están limitadas a las zonas públicas y a una designada, con frecuencia pequeña, zona de mujeres, las residentes en Dhammasara pueden moverse libremente en medio de los amplios espacios.
Otra diferencia en la experiencia de las laicas que han permanecido en Dhammasara, comparada a un monasterio masculino, es la oportunidad de participar totalmente en la comunidad y, así, tener una experiencia más auténtica de la vida monástica.
Como dice una mujer laica que reside durante más de un mes en Dhammasara, "Me siento como si realmente fuera parte de la comunidad, no solamente esa laica siempre cuidadosa de mantenerme distanciada de los monjes, es realmente maravilloso. Ante todo, simplemente me siento más a gusto. Pero también más involucrada en las actividades del monasterio. Tengo que aprender y seguir aún más las reglas de la comunidad. Todo esto me hace sentir que incluso como invitada soy casi una 'monástica', lo cual pienso que ha sido muy útil para mi práctica".
En el desarrollo de Dhammasara, Ajahn Vayama dio mucha importancia a instruir una forma monástica clara, que incluye una rutina monástica estructurada y las reglas de comportamiento monástico. "La forma monástica es en realidad valiosa porque constantemente te desafía a cumplir con la forma superficial, aún cuando ésta no sea de tu preferencia personal o lo que tienes ganas de hacer en el momento. Te hace trabajar constantemente sobre tus contaminaciones".
Como en todos los monasterios, los días en Dhammasara comienzan antes del amanecer. Dos veces a la semana hay sesiones grupales de meditación que comienzan a las 4:30 am, mientras que durante los otros días se hace práctica individual, lo que requiere aún mas disciplina personal. A esto le sigue un desayuno sencillo y un grupo se reúne para asuntos administrativos, y en ocasiones también una animada discusión sobre el Dharma.

Después de un período de trabajo matutino, vienen visitantes laicos a ofrecer la comida principal y las monjas dan una enseñanza de Dharma corta. Después de la comida, una monja mayor está disponible para hablar con los laicos. Una vez los laicos se marchan y termina la limpieza, uno está libre para seguir el estudio personal o la práctica del Dharma. Un momento grupal en la tarde a la hora del té es opcional, pero la mayoría aprovecha la oportunidad de estar juntas como una comunidad y hablar informalmente. Otra laica que permaneció tanto en el monasterio de monjes como en el de monjas comentaba, "Me gusta cómo puedes sentarte y hablar con las monjas. Es importante tener amigos espirituales con los cuales puedas discutir el Dharma".
Dos veces por semana hay un encuentro grupal para meditar, recitar y tener una conversación de Dharma. En ocasiones también hay una clase de estudio de suttas por la mañana una vez a la semana. El monasterio también tiene una amplia biblioteca de libros y conversaciones grabadas sobre Dharma. Así monjas y laicos invitados brindan un buen apoyo a su educación en el Dharma.
Las enseñanzas dadas están, de algún modo, adaptadas especialmente para las mujeres. Por ejemplo, un sutta seleccionado para un estudio profundo era sobre bhikkhunis arahant discípulas del Buddha y la forma en que cada una proclamó su iluminación. Esto puso en relieve y ofreció una mayor comprensión del logro espiritual de las mujeres, el cual rara vez es discutido en detalle en las conversaciones de Dharma de los monjes.
Además, una ventaja de aprender de una maestra es que "entiende mejor cómo actúa la mente de las mujeres. Ella ha trabajado con la misma intensidad lo que yo hasta ahora estoy trabajando", señaló la Hermana Seri, una de las monjas.
Los laicos también se benefician de las enseñanzas orientadas hacia la mujer provistas por las monjas. Aunque el monasterio de monjes lleva más tiempo establecido, muchos laicos deciden venir a Dhammasara también, o solamente a él. Cherry Jackson, una patrocinadora por muchos años de ambos monasterios afirma, "Podemos hablarles de mujer a mujer. Podemos discutir cosas aun más personales, y pueden darnos su consejo, especialmente en temas de mujeres".
Yannie Tan, otra patrocinadora de ambos lugares, dice que le gusta venir a Dhammasara porque allí puede ofrecer mayor servicio a las monjas. "Con los monjes, es muy limitado en cuanto a lo que podemos hacer por ellos. Pero con las monjas, puedo hacer cosas como llevarlas a lugares. Y luego en el coche, podemos hablar de una manera más informal. Puedo relacionarme con ellas con mayor facilidad y sentirme cómoda, porque las mujeres son más sensibles".
De hecho, en cierto sentido los hombres también encuentran mucho más fácil dirigirse a las monjas, aún a pesar de la exigencia de tener una chaperona cuando le hablan a una monja, tal como las mujeres deben tener un chaperón cuando le hablan a un monje. Ajahn Vayama anotó, "Muchos hombres sienten que pueden hablar sobre temas mucho más personales y emocionales con nosotras. Quizá no quieren ser vistos como 'blandos' con los monjes, pero no les importa exponer ese lado de sí mismos con una maestra".
Otra contribución significativa que las monjas hacen es proporcionar modelos de rol positivos, especialmente para las jóvenes y las mujeres.
Ajahn Vayama dice, "un valor asociado a que este monasterio de monjas sea independiente, es que moldeamos la formación para ser maestras del Dharma competentes, capaces y auténticas. No estamos en una competencia con Ajahn Brahm o los monjes. Pero estar separados nos permite ser apreciadas por derecho propio, no en una comparación con ellos".
Así, las monjas ofrecen a las mujeres algo a lo que aspirar en su desarrollo espiritual. Pero más que eso, también les proporcionan ejemplos de liderazgo en cualquier campo, no sólo en el espiritual.
"Me han dicho que tener una mujer al frente de la enseñanza y los retiros de Dharma, planteando preguntas, siendo reverenciada, ha sido positivo para muchas mujeres y muchachas. Especialmente para las jóvenes que están en los últimos años del colegio y están pensando en planes de carrera y se preguntan, '¿En realidad puedo hacer esto como una mujer?'. Han dicho que ha sido realmente inspirador para ellas ver a una mujer, sea yo o cualquier otra, haciendo esto", comparte Ajahn Vayama.
La realidad es, sin embargo, que en la tentativa de "hacerlo", todavía en muchos campos las mujeres deben lidiar con ciertas barreras e injusticias debido a su género. En esto, también, Ajahn Vayama puede ofrecer consejo a las mujeres basándose en sus experiencias personales en relación con tales desafíos. Si una muchacha por casualidad encuentra personas -hombres o mujeres- que no la apoyan, o incluso la desalientan, en la consecución del camino que escogió, diciéndole que no puede o no debe hacerlo, Ajahn Vayama ofrece este enfático consejo, "Sólo tienes que continuar. Sigue insistiendo en ello".
Luego si esas dos chicas singalesas escogen convertirse en monjas o no, los ejemplos positivos y los mensajes que han sido expuestos durante su visita a Dhammasara pueden haber dejado una impresión en sus jóvenes mentes. Quizá esto haya ayudado a cultivar la creencia de que pueden apuntar alto, y con determinación y trabajo, hacerlo bien en lo que sea que persigan -y también sembrarlas con confianza para ir hasta ello.

El Reestablecimiento de la Orden Theravada de Bhikkhuni en Sri Lanka

por Samaneri Suvimalee, Dialy News (Sri Lanka), Miércoles, Enero 31 de 2.007.

Sakyadhita International fue erigida por mujeres muy instruidas, tanto laicas como monjas budistas, tales como Dr. Sra. Frigiedgard Lottermuser, Ven. Karma Leshe Tsomo, Ven. Ayya Khema, Ven. Tenzing Palmo, Prof. Chatsumarn Kabilsinh (ahora Ven. Bhikkhuni Dhammananda de Tailandia), Kusuma Devendra (ahora Ven. Bhikkhuni Dr. Kusuma), Ven. Jampa Tsederon, Dra. Rita Gross, Ranjini de Silva y nuestra Dra. Hema Goonetillake. Sería tedioso mencionar toda la lista.
Baste decir que la organización tiene entre sus miembros a mujeres muy distinguidas. La organización nació aproximadamente en 1.987. Unos años más tarde, se estableció una delegación de Sakyadhita en Sri Lanka.
Una conferencia internacional de Sakyadhita fue sostenida en Colombo en 1.993, organizada por la Sra. Ranjini de Silva, presidente de la sucursal de Sakyadhita en Sri Lanka y que más tarde se convertiría en la presidenta internacional. El discurso de apertura de esta conferencia fue pronunciado por Kusuma Devendra (ahora Ven. Bhikkhuni Kusuma).
Ella está entre las pioneras de Sakyadhita International. Durante su vida laica había estado interesada en las Dasa-sil-matas y había realizado una investigación sobre ellas.
Este estudio le permitió darse cuenta de la vida de penurias que llevaban y de cómo eran marginadas por la sociedad. Luego de esto, realizó varias visitas al Ministerio de Asuntos Budistas para brindarles algún alivio.
Sus visitas resultaron en que las Dasa-sil-matas fuesen registradas como un primer paso y les fue dada una concesión para viajar y para un programa puesto en marcha para ellas que les permitía acceder a educación.
Uno de los principales objetivos de la organización era el re-establecimiento de la Orden de Bhikkhuni en los países Theravada.
Como los budistas en Sri Lanka sabemos, la Orden de Bhikkhuni fue establecida aquí por la Arahant Sanghamitta en el siglo III AEC (Antes de la Era Común). Sin embargo, ésta [la orden] murió aproximadamente en el siglo X o XI.
Muchas personas pensaban que no era posible introducirla nuevamente porque según las reglas del Vinaya debe haber Bhikkhunis ordenadas junto con Bhikkhus para ordenar a las posibles candidatas.
Esto es, por supuesto, una cuestión menor de la norma porque en el Culavagga del Vinaya Pitaka, que contiene la sección sobre la ordenación de bhikkhuni, el Buddha ha declarado que él da permiso a las bhikkhunis de ordenar bhikkhunis.
Aquella declaración fue hecha, al parecer, antes de que la elaboración de ceremonias evolucionara con respecto a la ordenación más alta. Afortunadamente, la investigación de la Dra. Hema Goonetillake en los registros chinos en China reveló que un grupo de bhikkhunis de Sri Lanka, liderado por la Ven. Devasara, fue invitado para establecer la Orden de Bhikkhuni allá.

Esto fue en el siglo V AEC con dos bhikkhus Theravada, siendo uno cingalés. Este es el linaje que aún persiste en la China Continental, Taiwán y Corea.
La Orden de Bhikkhuni Theravada fue restablecida en 1.998 en Bodh Gaya, con la ayudad de bhikkhunis de Fo Guan Shan (Taiwán), un pago de, por así decirlo, una deuda a Sri Lanka por haber dado la Orden de Bhikkhuni a los chinos en primer lugar.
Estamos agradecidas con el grupo de pioneras que obtuvieron la ordenación más alta en Sarnath de la representación coreana. Las bhikkhunis chinas siguieron, al igual que las bhikkhunis coreanas, el Vinaya Dharmagupta que es casi idéntico al Vinaya Theravada con unas pocas diferencias menores.
Aunque Vinaya Dharmagupta completo tiene más reglas para las bhikkhunis que el Theravada, la recién reestablecida Orden en Sri Lanka, desde luego, sigue el Vinaya Theravada.
Desde el establecimiento inicial de la Orden de Bhikkhuni Theravada, han habido varios grupos de posibles candidatas que han estado recibiendo la ordenación más alta junto con la ayuda de bhikkhunis en Taiwán o Corea.
Ahora las mismas monjas cingalesas entrenan y dan la ordenación más alta a novicias budistas (samaneris) junto a Bhikkhus Upadayayas cingaleses Theravada.
El Centro de meditación y entrenamiento Sakyadhita en Gorakana, Panadura, fue establecido en el año 2.000, Sus instalaciones y programas de entrenamiento fueron financiados por una organización filantrópica en Berlín, la Fundación Heinrich Boll.
El programa inicial de entrenamiento para bhikkhunis no sólo incluía estudio del Vinaya, sino otros varios aspectos del trabajo monástico y social. Estas bhikkhunis entrenadas en primer lugar regresaron a sus aramayas (en su mayoría procedían de la comunidad de Dasa-sil-matas) para entrenar a sus monjas pupilas de la misma forma.
Actualmente existen cerca de seiscientas o más bhikkhunis en Sri Lanka. Algunas de ellas tienen títulos universitarios así como de postgrado.
Algunas de ellas han seguido y están siguiendo cursos de asesoramiento psicológico conducidos por la Fundación Damrivi. Estas bhikkhunis entrenadas prestan un valioso servicio a la sociedad asesorando a los aldeanos que residen en los alrededores y cerca de sus aramayas.
Ellas han demostrado su valor en el trabajo de socorro por las inundaciones en el 2003, durante el desastre del tsunami en diciembre de 2005 y el trabajo de socorro en casos de desastre que sucedieron recientemente en Walapone a comienzos de este año.
El Centro de meditación y entrenamiento Sakyadhita en Gorakana se encuentra al final de un callejón con vista al Lago Bolgoda donde está el Centro de Simamalake. En este centro se imparte disciplina con una D capital. La campana para despertarse es a las 4:30 a.m. y el canto en el Viharage (cuarto santo) comienza a las 5 a.m.
A las 6 a.m. el vathpiliveth (trabajo que debe ser hecho en y alrededor del aramaya) comienza con varios grupos designados al barrido y la limpieza del cuarto santo, el área residencial incluyendo los baños, el jardín, los alrededores del árbol de Bo y también cocinando durante los días que no hay danas. Los sábados se dejan de lado para la limpieza cuidadosa de todo el establecimiento incluyendo la biblioteca de arriba.
La ofrenda (dana) de la mañana es a las 7 a.m. después de la ceremonia de ofrecimiento al Buddha en el cuarto santo. Desde las 9 a.m., la Pirivena (la escuela monástica) comienza sus clases.
Posterior al vathpiliveth de la tarde, la recitación comienza a las 5:45 p.m. Las monjas estudiantes repasan hasta las 9:30 p.m. Los estudios de Pirivena enfatizan mucho en la memorización y durante el vathpiliveth y las horas de estudio se puede escuchar jóvenes voces entonando en el estilo de gatha los versos del Dhammapada o slokas en sánscrito o pali, o las conjugaciones sánscritas de verbos y declinaciones de sustantivos.
Las materias en Pirivena son doctrina budista, pali, sánscrito, cingalés, inglés, Historia, Ciencia Social y Matemáticas.
Estas materias son ofrecidas para el examen final de Pirivena que tiene el mismo estándar que el de G.C.E. nivel 'O'. Se ofrecen tres materias para el siguiente examen que es el G.C.E. nivel 'A'.
Si la candidata aprueba este examen puede rendir el diploma de Budismo y Pali de la Universidad de Homagama y de aprobarlo puede avanzar a la licenciatura.
Aquellas que tengan las calificaciones necesarias para entrar a otras universidades pueden hacerlo.
Además de las clases en Pirivena y el vathpiliveth, las monjas estudiantes deben asistir a clases de meditación impartidas cada domingo, salir en respuesta a invitaciones para dana, bana o la recitación de pirith a enfermos o madres embarazadas.
Por lo general, la monja líder o una monja mayor mantienen ocupadas en actividades suplementarias. Las monjas jóvenes salen en Pindapatha los sábados y también los domingos. El asesoramiento recae sobretodo en los hombros de la monja líder.
Durante el retiro de lluvias, la agenda está más apretada porque cada tarde durante los 3 a 4 meses hay recitaciones de pirith, pujas al bodhi y sesiones de meditación. Las bhikkhunis siempre están disponibles a los aldeanos para aconsejarlos. Todos los días, prácticamente, es un día 'público' para aconsejar.
¿Cómo se llega a ser una bhikkhuni? Primero, uno debe ordenarse como samaneri, una novicia de diez preceptos, bajo la guía de una Acharya Bhikkhuni. Después de un período mínimo de dos años de entrenamiento, empieza el entrenamiento especial para la candidata a bhikkhuni bajo la guía de una Acharya Bhikkhuni y un Upadyaya Bhikkhu.
El Centro de meditación y entrenamiento Sakyadhita en Gorakana está bajo la tutela de un monje líder del Naugala Samasthalanka Sasanaloka Bhikshuni Sangama Mulasthanaya en Galigamuwa.
Las solicitudes se reciben allí y el examen final es de acuerdo con su concurrencia. El programa incluye la memorización de los primeros doce vaggas del Dhammapada, diez suttas del Digha Nikaya y, desde luego, conocimiento de la doctrina budista.
La ceremonia requiere de mucha disciplina y resistencia física. Es la culminación de la disciplina del aramaya y del entrenamiento especial que la novicia ha recibido, en ocasiones por más años en el caso de aquellas que se han convertido en samaneris muy jóvenes. Se debe alcanzar la edad de veinte años para ser elegible para la ordenación más alta.

Caminando por el mundo. Entrevista con Ajahn Sundara

Mountain Record: ¿Cómo llegó a encontrarse a usted misma como monja Theravada?

Ajahn Sundara: Crecí en Francia y provengo de una familia de buscadores. Buscaban la manera de llevar una vida que fuese mucho más significativa para ellos. Luego, fui cuidada en ese tipo de ambientes -con personas muy preocupadas por la sociedad y el mundo, tratando de crear un mejor lugar y tratando de criar a sus hijos de tal forma que se hiciesen más concientes de lo que debía ser un buen ser humano, para vivir una vida que no sólo esté fundada en la avaricia materialista, en el dinero, o incluso en el éxito. Finalmente, tomé la profesión de bailarina. Cuando descubrí la danza, se convirtió en una verdadera pasión y fue un medio para seguir mi búsqueda. ¿Por qué estamos aquí? ¿Cuál es la razón por la que vivimos de esta forma? aún no había descubierto mi mente pero sabía que había algo que estaba olvidando. Tenía un buen matrimonio con una persona muy amable, pero esto no me brindaba la respuesta a mis preguntas.
Comencé haciendo retiros, algunos en monasterios cristianos. Mi ex-esposo enseñaba religiones comparadas y fue un estudiante de un reconocido maestro de meditación, Ajahn Chah. Hice un retiro con Ajahn Sumedho y estudié meditación y esto llevó de una cosa a la otra y un par de años se convirtió en mi vida. Sólo decidí entrenar a su cargo. Esto fue hace 24 años. Y fue el comienzo de mi vida monástica.

MR: ¿Podría hablar un poco sobre lo que significa practicar en su tradición? Por ejemplo, para nosotros que practicamos Zen, el voto de Bodhisattva -para liberar a otros antes que a nosotros mismos- es el corazón de nuestra práctica, y nuestros monjes toman el voto de vivir una vida de servicio. ¿Cómo entiende la tradición Theravada este voto?

Ajahn Sundara: En nuestra comunidad en particular, hay un estímulo constante a encontrar un equilibrio entre el corazón al servicio y la apariencia de servicio, sirviendo a la comunidad en general. En nuestros monasterios estamos muy ocupados cuidando nuestra comunidad y entrenando monjes y monjas, etc., pero también está abierto a los visitantes. Impartimos retiros durante todo el año -diez días, dos semanas, meses, un fin de semana. Hemos acogido conferencias y retiros interreligiosos, que han sido maravillosos. Damos gran cantidad de enseñanzas fuera del monasterio, visitando diferentes grupos budistas -grupos universitarios budistas, grupos escolares budistas, y a personas dispersas por todo el país. Enseñamos en Europa y en América. Salimos mucho, de hecho, hemos tenido que reducirlas porque nos mantenía lejos de la comunidad demasiado tiempo y la comunidad se siente descuidada.
Vemos el servicio como el estar comprometido con su vida y vivirlo de la mejor manera que pueda en su propia comunidad. Se puede decir que aún cuando no tengamos tal énfasis en los votos del Bodhisattva -no está deletreado de la misma forma- como mi maestro dice "Cuando se libera del yo, ¿Qué más hay ahí sino ayudar a los demás?"

MR: ¿Por qué cree usted que existe tal división entre las escuelas Theravada y Mahayana?

Ajahn Sundara: Creo que la división surgió poco tiempo después de la muerte del Buddha. Algunos académicos han explicado que existió una escuela fuertemente apegada a la idea del modelo del arahant. Tal vez la Mahayana, la escuela del bodhisattva, surgió en reacción a esas primeras posiciones que se tomaron después de la muerte del Buddha. Tal vez no fue una gran división; quizá fue solo una reacción de los monjes que estudiaban mucho y no se preocupaban por el mundo y no tenían nada que ofrecer al resto de su sociedad.

MR: ¿Y ahora? ¿Cree que existe una gran división ahora?

Ajahn Sundara: Considero que la división entre las dos escuela está más en el texto que en la realidad. Conozco personas que han hecho algo grande de esto, pero se trata de un montón de malentendidos y de sentimientos sobre el Theravada, las escuelas "Hinayana". Como si el bodhisattva mahayana estuviera ocupado y en realidad no estuviese iluminado y el arahant no se preocupara por el mundo... Tal vez soy un poco cínica al respecto. La cosa es que, si usted practica no hablar extensamente de tales diferencias a nivel conceptual.

MR: ¿Cree que existe diferencia alguna entre las dos escuelas?

Ajahn Sundara: Cada escuela brinda diferentes medios hábiles para tratar con la mente y el cuerpo. La enseñanza del Buddha es, básicamente, una larga serie de medios hábiles para liberar al corazón del sufrimiento. Veo al voto del bodhisattva como otro medio, otra manera de explicar cómo se libera la mente del sufrimiento. Cuando lo escucho recitar que usted está dedicando su vida al beneficio de todos los seres sintientes, es como un medio de entrenamiento de la mente para alejar esa tendencia egocéntrica que sucede muy dramáticamente. Hacemos esto en nuestra meditación. En Estados Unidos esto se llama Insight Practice. Estamos aprendiendo acerca de la mente y sus patrones muy egoístas y la actividad egocéntrica, y tan sólo escuchando a la mente tal y como es. Entonces descubrimos que podemos dejar ir, dejar de lado que "la mente no-bodhisattva" se abandona y así la brecha se hace más y más pequeña.
Cuando estuve escuchando la enseñanza del Dalai Lama hace varios años, yo misma y otra monja que tomó los votos de Bodhisattva revisamos todos mis votos. Revisé los votos de bodhisattva en gran detalle y no había nada que me hiciera transgredir, nada que me impidiera seguir correctamente aquellos votos. Los veo como entrenamiento; el Voto del Bodhisattva entrena la mente tal como los preceptos lo hacen.

MR: Un antiguo maestro Zen dijo "la realidad de la ignorancia es a la vez la naturaleza de Buddha". He leído que en la escuela Theravada, la atención consciente se practica para protegerse de los tres venenos -deseo, aversión e ignorancia. ¿Es esta una diferencia en la comprensión de las dos escuelas?

Ajahn Sundara: Es una buena pregunta. Es bueno aclarar esto porque cuando la persona dice "que la atención consciente me proteja", ella, si está practicando correctamente, quiere decir que la proteja de actuar, pensar y hacer cosas de manera no-hábil, de dañar a otras personas. Es una forma de hablar sobre la atención consciente como presencia de la mente. Cuando usted está presente, aquí y ahora, es menos probable que actúe inhábilmente y diga algo perjudicial a otra persona o que piense dañosamente. No tiene nada que ver con proteger al ego. En realidad, lo que sucede -estoy segura de que en su práctica también- es que entre más practica, está más abierto a otras personas, tiene menos control en su vida, responde más a ésta sin pensar en usted mismo.

MR: En su tradición se mantiene una adherencia estricta al Vinaya. Esto significa, entre otras cosas, que no maneja dinero, o no come a menos que le sea ofrecido alimento. En otras palabras, usted depende completamente de otros. ¿Puede hablar sobre cómo se mueve por la sociedad occidental con estas preocupaciones especiales que alimentan el corazón y no el ego? ¿Cómo trabaja con toda la atención que recibe, sin sentirse separada o especial?

Ajahn Sundara: Ni siquiera es una cuestión que surja en algún nivel. Una vez usted se ha comprometido a este camino en particular -"este es mi compromiso"- eso es todo. Observo la belleza. Observo la alegría. También observo el resultado de mi compromiso en otras personas. Me doy cuenta que las personas están muy contentas de apoyar a un monje o una monja que ha hecho este compromiso. ¡Y no lo escribí! Sólo tomé los votos que estaban en el Vinaya y que fueron establecidos por el Buddha. Pero si, cuanto tomo este compromiso, o alguien lo toma, puede pulsar muchos botones por un occidental, por una mujer independiente, por alguien que no quiere depender de otro y así gran parte de nuestro entrenamiento se centra en moverse con gracia en aquel nuevo modo de vida. Aprendemos a no exigir, o crear problemas a otros. No me veo como especial. Solamente me veo como una monja Theravada ordinaria que anda por el mundo, y a veces, Dios, si fuese más independiente ¿no sería más fácil?
Esto ha sido una cuestión en nuestra comunidad, un diálogo en curso. La mayoría de los monjes y monjas que conozco sólo salen por invitación y la gente está feliz de ayudar. Si usted va alguna parte y dice "Pero no tengo dinero. Lo siento. Necesito una comida al día que no me puedo proveer por mí mismo", usted acaba siendo un dolor de cuello para las personas. No será una inspiración para la persona que tiene alrededor. Pero entiendo lo que quiere decir. Desde el exterior puede parece tremendamente especial, tiene que traerla desde el aeropuerto, tenemos que devolverla, no tiene dinero... bueno, es una transacción si usted quiere que un monje o una monja Theravada lo visite. Si no nos quieren, podemos quedarnos en nuestro monasterio. Está bien.
Es muy saludable disipar el misterio y los prejuicios.

MR: ¿Hay algo en el Vinaya que haya tenido que ser alterado en Occidente?

Ajahn Sundara: Cosas simples. Vestir sombreros y zapatos. También hemos recorrido un largo camino en dar a monjes y monjas el mismo nivel en términos de reconocimiento y respeto, en términos del modo que interactuamos en la vida diaria, incluso en las ceremonias. Monjes y monjas pueden enseñar, escuchar el Dhamma. Ambos controlamos nuestras comunidades. Los monjes y las monjas mayores dirigen el monasterio como un todo. Cuando llegué, al principio los monjes tenían que ser físicamente más altos que las monjas; lo hemos dejado de lado por completo y estamos juntos sobre el mismo piso. El Abad está en el medio, los monjes están de un lado y las monjas están del otro lado. Hemos seguido un camino largo desde el modelo tradicional.

MR: ¿Cómo decidieron cambiar un aspecto -sombreros y zapatos, todos sobre el mismo suelo- y mantener otros?

Ajahn Sundara: En el tiempo del Buddha, el protocolo que tenía dentro de la comunidad de monjes y monjas era un modelo tomado de su sociedad. Por ejemplo, en Sri Lanka los niños solían hacer reverencias en la mañana y en la tarde a sus padres y recitar un pequeño gatha de gratitud. No es sólo en la tradición monástica que usted tenía esta clase de modelo de diferenciación. Es idéntico al modelo que estaba vigente en la sociedad.
En la cultura occidental actual hemos estado derribando las barreras del sistema jerárquico y por eso todos estos cambios ocurrieron no tanto porque alguien tenía una idea -¡Cuando usted tiene juntas a cincuenta personas, tiene muchas ideas volando alrededor! Los cambios se produjeron a través de la experiencia, a través del descubrimiento con sólo ver lo que se valora y cómo se siente las cosas. ¿Cómo experimentamos un aspecto particular del Vinaya? Se siente cómodo- no en un nivel del Dhamma, sino al tipo de nivel convencional del día a día -¿Qué se siente apropiado? Desde que las mujeres tienen una voz fuerte, esto ha sido por mucho la luz que guía a través de nuestros cambios. Así mismo, a los hombres occidentales no les gusta ver a las mujeres en una posición inferior, o al menos no visualmente. Luego es aquí en dónde estamos trabajando juntos para realmente ver lo que es más cómodo en términos de mutuo respeto.

MR: Eso suena como a un proceso que podría ser muy complicado.

Ajahn Sundara: A menudo digo que si las cosas no se complicaran no habría trabajo del Dharma, esa es la labor de Mara. Mara complicará todo.

MR: ¿Puede describir a Mara?

Ajahn Sundara: Mara es la personificación del mal en el Budismo. Siempre está representado en los discursos del Buddha como un pequeño personaje muy cómico. A menudo visitaba a las primeras monjas iluminadas para desafiarlas. Por ejemplo, le dijo a una monja (estoy parafraseando) "Oh, usted es muy hermosa. Mire esto -sola en el bosque, a la sombra, perdiendo su tiempo. Usted podría ser mucho más afuera en el mundo". Y las monjas venían a ella y decían, "Te conozco, Mara". Mara persiguió al Buddha durante 45 años, tratando de tentarlo con todo tipo de objetos, aún cuando estuvo iluminado. Pero Mara, con aquellos monjes y monjas iluminados, siempre fue visto como un personaje estúpido que solamente venía tratando de engañar a estas monjas que afirman, "Te conozco Mara, he visto la limitación del placer sensual. He visto la muerte y el cese y no pertenezco más a este mundo". En los textos y discursos es representada como alguien que marcha con los hombros en alto, vigorosamente ofendida. Como dijo un reconocido maestro Sufí, "No necesita ir muy lejos para ver el mal. Sólo mírese a sí mismo". A menudo digo que Mara no es tan malo, el diablo no es tan malo, cuando nos miramos a nosotros mismos no es tan malo. En realidad somos muy dulces. Muchas partes de nosotros son muy agradables. Por lo tanto, es difícil ver a Mara porque con frecuencia es expresada en formas muy dulces y agradables.

MR: ¿Cómo aquellas monjas saben que las voces distractoras eran Mara y no el verdadero llamado a avanzar y entrar en el mundo? ¿Cómo alguien reconoce su verdadera voz?

Ajahn Sundara: Si sucede que usted se convierte en una monja, entonces ese es su llamado.

MR: ¿Alguna vez se han cometido errores?

Ajahn Sundara:No siempre es tan claro. Pero siempre puede colocar su corazón el lugar correcto. En su corazón puede plantar la semilla de la intención. Su anhelo, su voto -todo esto es la intención plantada en su corazón. Cuando usted recita los cánticos, en la mañana y en la tarde, usted está plantando, está dejando crecer estas intenciones al recordar su corazón una y otra y otra vez, y está cantando muy alto por lo que su mente va a oírlo! Definitivamente está gritándole a Mara. "Vamos a hacer el voto por todos los seres sintientes!" Mara surge: "Oh, ¿por qué tiene que hacer el voto por todos los seres sintientes? ¿Por qué no un poco de chocolate? No he comido desde el almuerzo, ¿qué hay de mí?
Usted no sabe. Gran parte de su vida es estar en un lugar de no conocimiento y permitir que los pensamientos que surjan, surjan, lleguen y se vayan, y después en algún punto sigue colocando su corazón en la posición de habilidad y luego algo sucede. La mayoría de la gente que se ha ordenado afirma "No sé cómo pasó. Eso fue todo. Yo sabía". ES como dejar ir de su corazón toda clase de preocupaciones y ansiedad y miedo y así sucesivamente, y luego llegar a un lugar de claridad, tal vez de paz. Entonces se encuentra a usted mismo en la situación y dice, "Dios, si hubiese pensado en ello tal vez nunca lo habría hecho". Estoy segura de que conoce ese lugar. Porque en algún punto deja de pensar y lleva a su corazón más allá de su intelecto, sus preocupación, o sus miedos. A medida que practica está más consciente de que Mara está allí.
Nunca decidí llegar a ser una monja. Solamente pasó. Estaba interesada en la enseñanza y la meditación, y básicamente estaba yendo a aprender mientras estaba con mi maestro y si tomaba una ordenación de monja, entonces bueno. Simplemente me ordenaré, así puede estar allí y continuar el estudio. Fue así -no fue algo como "Voy a ser una monja", y luego me fije esa tarea y proyecto. Fue tres años después que volteé hacia atrás y dije, "Si, creo que ahora soy una monja budista, Realmente puedo decir que soy una monja budista. Acepto que soy una monja budista". Por lo que no puede decir. Luego de un tiempo llega a conocer las voces de avidez, las voces de odio, las voces de la ilusión. Y llega a conocer lo que son esos fuegos; llega a conocerlos muy bien, así cuando se mueve, es cuidadoso. No los reprime sino que está atento y alerta a la posibilidad de transformación y al potencial de destrucción que tienen, incendiándolo hasta el suelo. Pero usted sabe desde un punto de vista práctico que no existe diferencia alguna entre Mara y nirvana. Mara es lo que necesita para liberarse a usted mismo. A menudo la tradición Theravada es vista como muy dualista: tiene que ser bueno, muy disciplinado y reprimir todas sus fuerzas y demás, todas sus energías, así puede seguir siendo un buen monje y una buena monja. ¿Esta es la basura que usted conoce? Esto no es cierto. En mi tradición, mi maestro decía con frecuencia que saltara en el fuego. Él diría, ¡salta en el horno!

MR: ¡Eso suena muy Mahayana!

Ajahn Sundara: Ahí va, ¿lo ve?

MR: Gracias

Ajahn Sundara: Con gusto