La Ordenación de Mujeres

Por Ajahn Brahmavamso



La Hermana Rocana dejó el Monasterio de Bodhinyana recientemente para tomar una ordenación ‘más alta’ en Inglaterra. Como he mencionado en el artículo en ‘Sangha News’, ella visitó Tailandia de camino y estaba algo decepcionada con lo que vio en oportunidades para las monjas allí. El lugar de las mujeres dentro del monacato Theravada es un problema no menos espinoso que algunos arbustos nativos de aquí en el monasterio! Pero no puede ser eludido. Sólo puede ser entendido en relación con el Vinaya, el cuerpo de reglas monásticas y regulaciones establecidas por el Buddha a las cuales están sujetos todo monje y monja Budista. Así en este quinto artículo de la serie discutiré LA ORDENACIÓN DE LAS MUJERES.

Bhikkhu’ es el nombre que denota al monje budista completamente ordenado. El término literalmente significa el que depende de limosnas. En consecuencia, una ‘Bhikkhuni’ es una monja budista completamente ordenada. Durante su vida, el Buddha estableció comunidades prósperas tanto de bhikkhus como de bhikkhunis. Sin embargo, el Buddha no sólo estableció más reglas de disciplina para las bhikkhunis, 311 en contraste con las 227 de los bhikkhus, sino que también hizo aún más difícil para ellas ser ordenadas.

Para ser una bhikkhuni una mujer debía comenzar por pedir la ‘ordenación’ como una sikkhamana (que significa mujer en entrenamiento) ante una asamblea de por lo menos 5 bhikkhunis. Su entrenamiento consistía en 6 reglas: los Cinco Preceptos, el tercero del cual fue ampliado para completar el celibato, más la abstención de comer fuera del tiempo de la mañana. Sólo cuando ella haya guardado estas reglas SIN ROMPERLAS DURANTE DOS AÑOS, puede, con el permiso de sus padres y esposo, tomar la ordenación más alta como una bhikkhuni. Si rompe un precepto, entonces comenzará su período de entrenamiento de nuevo. Habiéndolo completado, entonces deberá buscar una bhikkhuni experimentada con al menos 12 años para que sea su preceptora. Una preceptora tiene que ser convenida como tal por la comunidad local de bhikkhunis antes de que pueda ordenarse otra y aún entonces, sólo puede ordenar a una candidata cada dos años. La candidata primero es ordenada en una reunión formal de al menos 5 bhikkhunis y después esta ‘ordenación de un lado’ es confirmada ante una reunión formal de al menos 5 bhikkhus. Sólo entonces es una monja completamente ordenada según la tradición Theravada.

El Bhikkhuni Sangha floreció por varios siglos y se extendió en todas las zonas de Sur y Este de Asia. Parece haberse extinguido en Sri Lanka en el siglo XI (según el profesor Malalasekera) principalmente debido a la confusión civil proveniente de la invasión y la guerra. El hecho de que el Bhikkhuni Sangha no fuera reestablecido en las últimas décadas del siglo XI cuando Sri Lanka era otra vez pacífico sugiere que habían pocas bhikkhunis en tierras vecinas, como India o Birmania, a las que podrían invitar a Sri Lanka para reestablecer la tradición. Para, como se explicó antes, ordenar a otra bhikkhuni se requería como mínimo la existencia de 5 bhikkhunis, una vez que su número se redujo a menos de cinco la orden fue cerrada.

Por muchos siglos, los budistas en Sri Lanka, Tailandia y Birmania han asumido que la Orden de Bhikkhunis murió hace años y es imposible revivirla. Para compensar esto, otras tradiciones monásticas femeninas han sido establecidas por los monjes para ayudar a dar la oportunidad a las mujeres de vivir una vida meditativa simple. Tal Orden es la de las monjas de túnica blanca de Tailandia que guardan los 8 preceptos y como una monja era la Hermana Rocana. Pero siendo una adición posterior, esta ordenación carece del estado del estatus de haber sido establecida por el Buddha y carece de la autoridad de una tradición antigua y así los prejuicios sociales y culturales han sido capaces de echar raíces y prevalecer. Por esta razón, muchos monjes mayores, tal como Ajahn Sumedho en Inglaterra por ejemplo, han intentado reestablecer y construir la ordenación de novicia. Aún menos que una bhikkhuni, una novicia viste de marrón y guarda esencialmente los 10 preceptos, el último de los cuales se abstiene del empleo o la posesión de dinero. Así una novicia es más de una renunciante que de la monja tailandesa de túnica blanca, y, llevando hábitos similares en apariencia a los de los monjes, puede conseguir el mayor respeto que merece.

Incluso recientemente ha habido mucha discusión, esto es en la década pasada o algo así, de si es posible revivir la ordenación completa de bhikkhuni. Existen bhikkhunis de la Tradición Mahayana en Taiwán y Hong Kong. ‘Bhikksuni’ es simplemente el equivalente en Sánscrito (la lengua Mahayana) de nuestra ‘Bhikkhuni’, si resulta que el procedimiento de ordenación usado por las bhikksunis Mahayanas contiene los elementos indispensables de una resolución formal, poner tres veces una reunión de por lo menos 5 bhikkhunis, informándole a los reunidos que la candidata desea ordenarse como una bhikkhuni y pidiéndole su aprobación, entonces la ordenación probablemente es válida para los estándares Theravada. Si esto es así, y no tengo información alguna al respecto actualmente, entonces podemos ver la contraparte femenina completa de los monjes restaurada por la Tradición Theravada.

Independientemente de los detalles técnicos, siempre habrá que tener presente el viejo proverbio inglés: “Donde hay una voluntad, hay un camino”. A menudo me asombro de ver hasta dónde las reglas se pueden doblar bajo el peso de la compasión. Todo lo que se necesita es el motivo para hacer el doblez, y ese motivo aumentará al igual que el número de mujeres que muestran con su ejemplo una buena voluntad para entregarse a una vida de renunciante.




(BSWA Newsletter, Enero-Marzo 1990)

0 comentarios: